Son verdaderamente sorprendentes, sin ellos no existiría la penicilina, este antibiótico utilizado en el tratamiento de infecciones provocadas por bacterias. La penicilina fue el primer antibiótico utilizado ampliamente en beneficio de la salud de las personas.
En el año 1928 Fleming se encontraba estudiando las bacterias "Estafilococos Dorados”, casualmente descubrió que estas eran destruidas por un hongo muy común originado por la descomposición de ciertas sustancias. De este modo se descubrió la penicilina; abriendo las puertas a la revolución antibiótica. Muchas especialidades médicas no existirían hoy si Fleming no hubiera hecho este descubrimiento, que ha permitido aumentar lo índices de esperanzas de vida de personas de todo el mundo.
¿Y en Chile nos hemos preocupado de investigar sobre estos simpáticos amiguitos en forma de sombrilla?
¿Cuántos nos estamos perdiendo de descubrir en beneficio de la medicina. Si tenemos tanta diversidad de estos ejemplares en nuestro país?.
Los digueñes: Son hongos que crecen en los robles, árboles nativos del sur de Chile. Son muy agradables de comer ya sea en ensaladas, guisos, tortillas o fritos. Los digueñes son muy apetecidos comercialmente hablando, brotan desde agosto, cuando las lluvias humedecen el ambiente hasta diciembre aproximadamente, con el calor y la humedad se crea un ambiente propicio para su desarrollo.
Las Pinatras: Este hongo crece en los robles, su tamaño es mayor que los digueñes y su sabor es mas dulce, lo que las hace muy atractiva para insectos y gusanos por lo que la temporada es cortísima.
Los Changles: Este hongo crece en otoño, crece en el suelo húmedo, de donde es recolectado, siendo objeto de comercio en las ciudades del sur de Chile, donde se prepara de diversas maneras, en empanadas fritas, acompañados de puré de papas, con carnes, verduras, etc. Para preparar los changles es necesario cocerlos con abundante agua, luego se les retira para posteriormente picarlos, freírlos con cebollitas picada o con algún acompañamiento a elección.
Los Champiñones: Son hongos comestibles, además de ser delicioso, es un alimento de escaso nivel calórico, elevado valor nutricional y rico en agua. Contiene, también, un gran número de vitaminas, minerales, proteínas y aminoácidos que, junto a las escasas calorías que presenta, hace que el champiñón sea la mejor elección para elaborar unos platos llenos de energía y sabor.
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